Repertorio de la guitarra

[El material principal de esta página está extraído del libro publicado por María Jesús Castro, Historia Musical del flamenco, 2007, Barcelona: Beethoven Publicacions, p. 35]

 

PERIODO CA. 1860-1920   

Música instrumental

  La música instrumental del periodo entre las décadas de 1860 y 1920 se halla aún en el proceso de acompañamiento al cante. Las formas instrumentales de acompañamiento se concretan en el toque llamado “por arriba, en el modo flamenco en mi, y en el toque “por medio”, en el modo flamenco en la.

      De igual forma y respecto a las técnicas de composición instrumentistas, éstas son básicas y trabajan el concepto de diferencias y variaciones, en las que el tema o motivo principal es alterado en algún aspecto armónico, melódico, rítmico o tímbrico, sin llegar a transformar por completo el tema, para así facilitar el reconocimiento por parte del oyente de cada estilo musical. Es lo que se va a conocer como “compás flamenco”, frase musical especialmente guitarrística que se va repitiendo a lo largo de la obra musical y que va a colaborar a consolidar los temas característicos de cada uno de los modelos.

PERIODO CA. 1920-1950

Música instrumental de acompañamiento

     La guitarra de acompañamiento mantuvo el concepto del bajo continuo, armónico y servil al cante, música horizontal, para destacar los tiempos fuertes del compás, es decir, marcar el ritmo de lo que se está escuchando. De manera que un análisis formal del acompañamiento al cante evidencia la utilización de la progresión de acordes o rueda de acordes, en la que se produce la reiteración de una cadencia (IV-III-II-I), a modo de repetición del compás, principalmente en el acompañamiento al baile.

     Por otro lado, la utilización de nuevos recursos técnicos en ambas manos apremió un cambio en la posición de la guitarra, más cercana la mano derecha a la boca, y un abandono de la posición vertical distintiva de los guitarristas del periodo anterior.

     En relación con las características de composición, se amplia el número de modos, se introduce el modo en fa# y se consolida el modo en si.

Música instrumental solista (preconcierto)

     Paralelamente al desarrollo de la música instrumental de acompañamiento al cante y al baile, se inició el proceso de separación del instrumento con respecto a la voz.

     La guitarra se fue emancipando progresivamente del acompañamiento al cante, gracias a que se utilizó correctamente el recurso del cambio de tono o modulación, y por consiguiente la tonalidad, y con ello se podía identificar los estilos claramente sin tener que recurrir a las melodías vocales.

    No obstante, a pesar de este principio que dio lugar a una primigenia escuela preconcertística, todavía no se desarrolló este concepto en este periodo por diferentes motivos. En primer lugar, la tendencia de la guitarra de preconcierto es la de mantener las estructuras horizontales según un tratamiento vocal de sus líneas melódicas, y para ello recurrió a las ruedas de acordes anteriormente reseñadas. Los primeros guitarristas utilizaron en sus creaciones los recursos compositivos estrictamente melódicos: repetición, imitación, progresión, etc. según el material temático inicial.

    De manera que aún hablamos de la escuela preconcertista, en la que la melodía pasó de estar vinculada a los aires de danzas del periodo anterior, a ser dependiente de lo vocal en este periodo, una vez que los estilos principales estuvieron configurados con su compás característico.

    Este preconcertismo, en figuras como Ramón Montoya y el Niño Ricardo, se concretó en la reiteración de un tratamiento melódico de la música con los mismos conceptos que lo vocal, en cuanto a repetición, imitación y progresión.

     En segundo lugar, en este período artístico la composición musical hizo uso de la unión de unas variaciones con otras que se ampliaron en dos ciclos como mínimo, en los que se iban a entrever los conceptos de pregunta-respuesta y en algunos casos de desarrollo, a diferencia del período anterior en el que las variaciones eran formalmente más simples, con una duración de un ciclo generalmente. También se recurrió a las múltiples variantes sobre el mismo tema, sin olvidar que el avance del proceso compositivo se vio determinado por la mejora de los recursos técnicos.

    A modo de conclusión, podemos afirmar que en las décadas aproximadas entre 1920 y 1950 aún no vamos a apreciar el concepto de obra instrumental totalmente independiente debido a las características antes reseñadas de la utilización de un tratamiento vocal de las líneas melódicas y de los recursos compositivos estrictamente melódicos, entre otros aspectos.

    Por ello, la evolución del proceso de la autonomía de la guitarra respecto al cante sucederá en un intervalo de tiempo más amplio que un período artístico, y en consecuencia se inició con PACO EL DE LUCENAMIGUEL BORRULL CASTELLÓ y RAMÓN MONTOYA, entre otros, y no se ultimó hasta SABICAS, ya en el periodo posterior.